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Glaseado real – Glaseado de azúcar

La guinda real es ese glaseado, generalmente blanco, que mucha gente utiliza para decorar pasteles y postres.

Clásicamente es blanco, pero es habitual, en la repostería moderna, añadir colorantes de los más diversos colores para dar un toque diferente al azúcar glas.

Además de cambiar el color, también hay varias recetas con la adición de limón, lo que le da un sabor cítrico al morder el postre.

Qué encontrarás en este contenido

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Tipos de glaseado de azúcar

Aunque estamos hablando de glaseado de azúcar, pero tradicional y sencillo, también existen muchos tipos de glaseado en el mercado. La mayoría de ellos se utilizan para cubrir pasteles.

El glaseado marmolado, también llamado pasta americana, es un tipo de glaseado más duro, y la diferencia de este tipo de glaseado en su receta es la adición de gelatina incolora, glucosa y mantequilla en su receta.
También está el royal icing, que es casi lo mismo que el sugar icing, siendo un poco más duro que este, y un poco más blando, y crujiente que el marmoleado.

Si quieres aprender a hacer la clásica guinda, no es difícil hacer este tipo de glasa, por eso te vamos a enseñar ahora a probar en casa un topping de tarta tan delicioso como este.

Receta de glaseado real casero

Para hacer esta receta, necesitarás:
– Media taza de azúcar glas ;
– 1 cucharadita de leche.

Cómo preparar la guinda real:
En un tazón, combine media taza de azúcar glas con 1 cucharadita de leche. Mezclar bien.

Esta receta no va al fuego.

El punto del almíbar se decide a ojo. Si te parece demasiado aguada, debes agregar más azúcar, y si parece dura, agregar más leche.

Para poner este almíbar en el bizcocho, se debe esperar a que el bizcocho se enfríe por completo, ya que si el bizcocho está caliente no se formará el cono seco en el almíbar, que es lo esperado.

Aún así, puedes sustituir la leche por zumo de limón, para que el almíbar tenga un sabor más agrio.

Para hacer este jarabe de color, basta con realizar la misma receta, pero añadiendo colorante, en polvo o gotas, del color elegido.

Al final, solo decora, con el almíbar y algún otro elemento que te parezca interesante, como la ralladura de limón, los trocitos de fresa o la cereza, ¡un clásico!

Receta de glaseado de azúcar y limón

Ingredientes:
1 taza de azúcar glas
2 cucharadas de jugo de limón

Modo de preparo:
Coloque el azúcar glas en un tazón, luego agregue el jugo de limón.

Remueve hasta formar un jarabe espeso.

Ahora puede usar su glaseado de azúcar de limón.

Aplicaciones de glaseado de azúcar

No tienes que usar este delicioso glaseado de azúcar solo para pasteles caseros.

Todavía se puede utilizar en la decoración y finalización de las conocidas galletas navideñas y otras galletas, o incluso decorar los ya conocidos cupcakes, que con la fama que han adquirido tienen una serie de posibilidades de cobertura, entre ellas el uso de azúcar glas, blanca o de color, para tu decoración.

Dificultad para encontrar el punto de congelación

Debido a que muchas veces se hace manualmente, o por falta de experiencia, a veces las personas tienen cierta dificultad para llegar al punto de azúcar glas.
Así, una gran opción que se encuentra en el mercado es sustituir el huevo por el llamado polvo de merengue.

Este polvo, que es un tipo de clara de huevo deshidratada, además de evitar el riesgo de casos de salmonella por utilizar un huevo crudo, también facilita encontrar el punto de guinda, que en ocasiones, por falta de experiencia en repostería, puede realmente ser difícil de encontrar.

Además, este polvo de merengue ya huele a vainilla, reduciendo así también el fuerte olor, muy presente en la yema de huevo, cuando se utiliza en su estado natural en recetas culinarias.

Este polvo es tan bueno que incluso aumenta la durabilidad del glaseado, ya que en la receta clásica, fuera de la heladera, el glaseado se endurece rápidamente, perdiendo así fácilmente su funcionalidad (además de estropearse muy rápido).

glaseado real fluido

La preparación es la misma que la del royal icing, solo que suavizada con un poco de agua.

Generalmente se utiliza para rellenar figuras.

Para saber el punto correcto, basta con poner una cucharada pequeña de glaseado líquido sobre la mesa.

Luego coloca otra cucharada encima de la primera.

Las gotas se unen lentamente y la superficie original no aumenta, volviéndose suave y uniforme.

Este es el punto correcto.

Por el contrario, si las gotas se juntan demasiado rápido y aumenta la superficie original, significa que se ha añadido más cantidad de la necesaria para ablandar el glaseado.

Otro error que puede ocurrir es que al poner poca cantidad de agua las gotas no se unan. En estos dos casos, surgirán dificultades en la realización del trabajo de confección.